Comida de Navidad española, británica y vegetariana
Crea tus propias tradiciones
La cena de Nochebuena o la comida de Navidad es un evento que reúne a los más allegados. Cada familia crea sus propias tradiciones y, año tras año, se repiten y afianzan hasta crear un sentimiento único en los que son partícipes. Aun con todo esto, es cierto que cada país tiene tradiciones generales.
Comida tradicional española
Los entrantes son los que abren el apetito, un buen plato de jamón, embutidos variados y queso manchego son un acierto asegurado muy fácil de preparar. Los canapés de fois y huevos rellenos añadirán un toque diferente y más variado a la mesa. Los mariscos son el plato estrella en muchas de las casas españolas, un plato de langostinos con mahonesa durarán poco. Añade más sabor marítimo con moluscos como almejas u ostras. Los consomés son ligeros y todos tus invitados se sentirán reconfortados con su calor.
¡Cuidado con todos esos entrantes, debes dejar sitio para el resto! Los platos principales se suelen dividir en carne o pescado. Un plato de salmón, atún o lenguado al horno, aliñado bien con frutas bien con especias es ideal para los amantes de los productos del mar.
Si en tu casa sois más carnívoros, la pata de cordero asada o un pavo relleno acompañados con patatas en forma de puré, patata a lo pobre o asada.
¿Qué es una navidad sin muchos dulces? En España tenemos mucha variedad, turrón de sabores diferentes, polvorones, mantecados y mazapanes. Un día es un día, todos los excesos de la navidad los podrás quemar en nuestro gimnasio Altafit, así que come sin preocuparte. La Navidad no es lo mismo sin una botella de anís que acompañe a los villancicos.
Comida tradicional británica
Es probable que te encuentres entrantes de salmón ahumado y patés en una mesa británica el Día de Navidad. Las sopas también son una buena opción mientras los invitados esperan al esperado plato principal.
El plato navideño por excelencia es el pavo asado relleno acompañado por “roast potatoes”, que son patatas cortadas en cuartos y asadas. Las patatas pueden presentarse también en forma de puré. Este plato suele llevar también como guarnición verduras varias, entre las que no pueden faltar las coles de Bruselas y las zanahorias, y salchichas envueltas en tiras de bacon. El pan se sustituye por “yorkshire puddings”, combina perfectamente con el resto de productos. Completa el plato con una buena salsa. Salsa “gravy”, hecha con los excedentes del jugo de la carne, o salsa de arándanos, que le dará un toque más dulce y contrastará con el pavo.
Tras todo esto, el postre está al llegar. El “pudding” de Navidad, hecho de fruta seca, se sirve con un chorro de Brandy que se flambea ante los invitados. Cuando las llamas se hayan fundido, báñalo en custard, una especie de natilla más líquida. El “Fruit Trifle” triunfa entre los niños. Está formado por natillas, bizcocho, fruta, gelatina y mucha nata.
Tras tanta comida hace falta un descanso, pero aquí no acaba todo. Combate contra el frío con “mulled wine”, vino con especias que se sirve caliente y “mince pies”, pastelitos rellenos de fruta.
Opción vegetariana
En las opciones anteriores la carne y el pescado son los productos predominantes de la comida de navidad, sin embargo, existen muchas posibilidades de comida vegetariana para que puedas crear tus propias tradiciones sin perderte nada.
En los entrantes juega con la cocción y las texturas de los productos. Unos rollitos de pepino y crema de queso darán caché y frescura. Hummus de varios tipos y paté de setas van genial con tostadas o pan de pita. Champiñones al horno rellenas de verduras o queso y espinacas también son un acierto.
El plato principal en este caso puede ser muy variado. Una lasaña de verduras gustará sin duda. Los barquitos de calabacín relleno de verduras son ligeros y pueden acompañar a cualquiera de los otros platos, al igual que el ratatui. Un “nut roast” o pastel salado de frutos secos da consistencia y proteínas a tu comida, también perfecto como acompañante. Un pastel de patatas merecerá la pena, al igual que una quiche de espinacas y tomate cherry.
Finaliza tu comida con el postre. Puedes completar el menú con un strudel de manzana y almendras, una macedonia ligera o incluso el “pudding” de Navidad que se come en Reino Unido.