Seguimos desmontando la idea de que el otoño es una estación apagada y neutra. Dale un toque de color en tu rostro y te hará ver las cosas de forma diferente. ¿Y qué mejor forma de hacerlo que con nuestra propia estética? En concreto, con el eyeliner que casi siempre nos acompaña.

Si bien el eyeliner negro es un must en cualquier neceser, estos meses te pedimos que lo dejes un poco de lado y te hagas con un hermanito más colorido. ¡El eyeliner de colores es el producto que está pidiendo a gritos entrar en tu bolso! No temas: puedes seguir aplicándolo de la misma manera que el negro. Tampoco le des mucha importancia a lo rara que te vas a ver el primer día tras tantos años usando el negro… ¡Hay que innovar!

¿Y cuáles?

Si te atreves con el dorado, puedes probar el Super Colour de Kiko Milano, con pincel aplicador en forma cónica. Hay otros tonos disponibles, como el azul, el violeta o el plata.

En tonos más claros y dulces, tienes el Fantasy Eyeliner I Heart Revolution en Primor. Desde el perla hasta el rosa bebé, este producto destaca por su gracioso envase en forma de cuerno de unicornio… ¡Y por su precio! Solo 3,99€.

¿Cómo pintarse el eyeliner?

Es un arte, sí, pero incluso las más torpes podemos hacer nuestras obras, porque según tu destreza puedes pintártelo de mil maneras. El “rabillo” o “cat eye” es imprescindible en cualquiera de ellas para que se vea bien el color.

¿Te atreves?

Si eres de las realmente atrevidas, recuerda que siempre puedes combinar esta tendencia con la del high-lighter, de la que el otro día te recomendábamos esto.